18 DE FEBRERO: DÍA MUNDIAL DEL SÍNDROME DE ASPERGER

Hoy, 18 de febrero, se celebra el día mundial del síndrome de Asperger. Y es hoy porque es cuando nació Hans Asperger, el primero que describió el síndrome.

El Síndrome de Asperger forma parte de TEA, siendo un trastorno del neurodesarrollo, por lo que funciona de manera diferente a lo considerado normal, especialmente en el área de:

  • la comunicación: tanto en la verbal como en la no verbal. Las metáforas, ironía, frases no literales,…, no las entienden, ya que hacen interpretaciones literales de los mensajes que les damos. Y eso también se observa en la lectura, les cuesta hacer inferencias. Puede también estar retrasado la adquisición del lenguaje.
  • interacción social: tienen habilidades sociales pobres. No dan las respuestas sociales y emocionales adecuadas. Puede que no tengan necesidad de compartir información ni experiencia con los demás. Y eso se observa en sus dificultades para hacer amigos de su edad, siendo muchas veces el blanco de burlas de sus compañeros, ya que no las entienden. Pero también es porque no ven el todo de la situación, sino que se quedan con pequeños detalles.
  • adaptación al día a día. No son muy flexibles. Se imponen a sus rutinas, tanto a ellos como a los demás, desde donde irán, quien irá a buscarlo al cole, que se va a comer,…
  • tienen intereses restringidos: se suelen obsesionar con ciertos asuntos, como dinosaurios, ordenadores, universo,…
  • rutinas repetitivas, rituales. 

Y a pesar de estas dificultades tienen un lenguaje fluido y una capacidad intelectual media o superior a la población.

Pero lo importante en este síndrome, como en cualquier trastorno, es la detección y atención temprana, ya que de esta forma los resultados observados son mucho mayores.

En Ensenya´m tenemos y hemos tenido a pacientes con Asperger, y la verdad, es que se les coge un cariño especial. Nunca olvidaré el primer Asperger que apareció en mi vida, y en ella sigue. No lo cambio por nada ni nadie.

Empecé trabajando con él desde pequeño. Pero no sólo con él, sino tmabién con su familia. Ya que no podemos olvidar nunca, dentro del tratamiento, a la familia. Y nosotras esto lo tenemos muy en cuenta, el ayudar y apoyar a la familia en todo el tratamiento. Y el colegio al que asiste. Debido a que es muy importante la coordinación en este aspecto, para que todos podas trabajar en la misma línea, algo necesario para el niño.

Con él, y con todos, empezamos trabajando tanto las relaciones sociales, ya que consideramos que es algo muy importante para él en el colegio, por ejemplo, y para su autoestima, pero también trabajamos la flexibilidad, mediante historias sociales y paneles, emociones, que tanto les cuesta entender en muchos momentos, tanto en él, lo que está sintiendo, como lo que los demás sienten, y aquí incluimos ironía, frases hechas, cómo acercarnos a los demás,…

Estos niños son:

  • cariñosos, aunque a los de fuera no se lo parezca.
  • leales, porque otra cosa no, pero las normas las conocen y no se las saltan.
  • amigos perfectos, saben guardar secretos. Y si de verdad son sus amigos, los entienden y ayudan en todo lo que puedan.
  • expertos, en todo lo que les gusta son grandes expertos. Pueden aprender a leer antes por su interés por los animales; aprender a hacer operaciones antes por su interés por los números; aprender idiomas, dinosaurios, temas sobre el universo,…., por su interés.
  • ordenados. Es algo que necesitan en sus vidas y no pueden ver cosas fuera de sitio o mal puesto, ya que para ellos tiene su sitio y ahí debe de estar.
  • felices. Y si logramos entrar en su pequeño mundo, que es lo que debemos hacer y para lo que trabajamos, les ayudaremos a entender mejor a la sociedad.
  • acaban lo que empiezan.

Los problemas pueden aparecer a partir de los 9-10 años y/o adolescencia.

En los primeros años pueden ser porque no encuentren su lugar en el mundo, no entiendan ciertas actitudes de los otros niños, el porque se ríen de ciertas cosas o porque tiene que estudiar asignaturas que no le gustan.

Mientras que en la adolescencia, lo difícil es afrontar la carencia de amistades. Aunque hay quienes no tienen ese interés, no tienen la necesidad de estar con los demás.

Pero si que hay que trabajar con ellos las habilidades sociales, para que aproveche todas las oportunidades que se le presenten para interactuar de manera correcta.

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